martes, 2 de octubre de 2012

Capítulo 2: “Fake Plastic Trees”. Radiohead. (1995)





Deprimartes artificial.



En pocos lugares nos vemos tan enfrentados con la realidad de ser simples engranajes de un sistema consumista como en un supermercado. ¿Cómo hacer entonces para seguir sintiéndonos vivos en un lugar en donde nos transformamos en seres de plástico, extensiones vivas de nuestras propias tarjetas de crédito?: “Una regadera de plástico verde para regar su arbolito chino de goma plantado en tierra plástica falsa, que ella le compró a un hombre de goma en una ciudad llena de planes de goma, sólo para librarse de su sensación de opresión. Todo eso la consume”. Thom Yorke nos canta con su cara de loquito que todo es mentira, todo es plástico, todo es una imitación patética de la realidad. Entonces, consumí y comprá cosas que no necesitás sólo para llenar el hueco vacío de tu existencia: “Ella vive con un hombre con el espíritu roto, un hombre quebradizo de polietileno que se desmorona y se quema. Él solía hacerles cirugías estéticas a las chicas en los años ochenta, pero esa era una batalla que siempre ganaba la gravedad. Y todo eso aún lo consume”.



Por algo los carritos de compras tienen ruedas. Te invitan a no detenerte. Por favor, seguí rodando por esos laberintos de góndolas, elegí tus artículos de dudosa necesidad dispuestos en cantidades abrumadoras. Sentite cuidado por seres armados con pistolas remarcadoras y por cámaras de seguridad que nadie sabe qué observan, en este submundo donde las palabras más importantes parecen ser “oferta” o “fecha de vencimiento”. Esquivá y luego aceptá las promociones donde se te invita a probar nuevos artículos que nunca vas a usar, y despedite de esta pantomima frente a una cajera que hace su trabajo como un androide que sueña con cualquier realidad excepto la que le tocó vivir. Por favor, no te detengas. Porque si lo hacés, si por un segundo te ponés a pensar en un supermercado, te das cuenta de que nada tiene el menor sentido: “Ella se ve como algo real, tiene hasta el sabor de algo real, pero es mi amor plástico de mentira. Y no puedo evitar el sentir que podría salir volando a través del techo, sí tan solo me diera vuelta y empezara a correr. Todo eso me termina consumiendo”.



Humildemente, creo que Radiohead es el grupo que ha llevado a un nuevo nivel el arte de ponerle una banda de sonido a la depresión. No creo que haya artistas que se hayan preocupado y ocupado más en hacer que todos los suicidas en potencia nos sintamos tan identificados con este estilo de música. Y esto lo han complementado siempre con letras que abrazan lo existencial, historias que terminan siendo parábolas que acarician corazones tullidos y almas a medio derribar. Como termina postulando este video: “Si tan solo pudiera ser todo el tiempo eso que tú quieres que yo sea…”. Si así hubiera sido, si yo hubiera podido agradarte un poco más… Seguramente hoy estarías aquí, a mi lado, comprando conmigo en esta enorme rueda de hámster llamada supermercado. Me alegro de no haberte arrastrado a este infierno. ¡Feliz Deprimartes!

3 comentarios:

  1. El video de estética noventosa también es más que interesante. Thom Yorke es como un "niño crecidito" sentado en un changuito que lo guía por una suerte de paseo alienante. (Me hizo acordar a como lo llevan en Karma Police, pero en el asiento trasero de un auto). Recuerdo cuando escuche por primera vez "OK Computer". La solidez con la que tratan la depresión, el sofocamiento y la alienación en ese disco es admirable. Si bien le afano unas cuantas cosas a Jeff Buclkey (otro tremendo depresivo), no hay voz como la de Thom Yorke.

    Iván Campos

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  2. Haciendo analogías, eso de dejarse llevar en viajes alienantes... ¿A qué me suena? jajaja... Ok Computer, probablemente el mejor disco de la década del '90 (cabeza a cabeza con Achtung Baby de U2 y Blood Sugar Sex Magic de los RHCP), el álbum que graficó a la perfección lo que es deprimirse en una gran ciudad.

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    Respuestas
    1. Para mi, que ya cuento con 31 años en la mochila, esos discos que mencionas, junto a varios otros, pueden ser la banda sonora de mi adolescencia noventosa; adolescencia alienante, tortuosa y confundida.
      Te cuento que no puedo evitar escuchar "The tourist", que creo asi se llama el ultimo track de ese discazo y emocionarme mientras me recuerdo en esos años de colegio.
      Gran compañía fueron para mi esos discos... junto a Soundgarden(ese de los 90 y no el de ahora, por supuesto), Nirvana y Heroes del Silencio.

      Iván Campos

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