Pongámonos en situación.
Transcurría la mitad de los 80's, y esta exitosa banda de la antigua Alemania
occidental vivía con miedo. En plena Guerra Fría, se preguntaban de qué lado
del muro oprimirían primero el botón rojo y nos pondrían a todos en un infierno
atómico. Pero lo hacían sin dejar de preocuparse por pasarla bien: "Bailemos con estilo, bailemos por un rato. El
paraíso puede esperar, por ahora sólo nos quedaremos observando el cielo.
Deseando lo mejor pero esperando lo peor. ¿Van a arrojar la bomba o no?".
La poca certeza de una vida inmediata invita a una reflexión al mejor estilo
del Eclesiastés: "Algunos son como el agua, y
otros como el calor. Algunos son la melodía y otros son el ritmo. Pero tarde o
temprano, todos se irán. ¿Por qué no pueden permanecer jóvenes? Es tan difícil
envejecer sin una razón. No quiero morir como un caballo viejo. La juventud es
como un diamante bajo el sol, y los diamantes son para siempre”.
La falta de seguridad sobre el
futuro hace que la vida misma empiece a perder sentido. ¿Para qué conservar el
honor, si no tenemos una vida como para ejercerlo? Y entonces aparece la opción
de negociar la propia dignidad: “Así que déjennos
morir jóvenes o déjennos vivir para siempre, no ostentamos ningún poder, pero
al menos no le decimos que no a nada. Porque vivir metido en un agujero te hace
sentir que la vida es un viaje muy corto, y que la música es solamente algo
triste. Imagínate cuando esto ya sea un partido ganado, podremos mirar al sol
de frente. Nos pondremos a tono alabando a nuestros líderes… Ahora la música
parece algo sólo reservado a los locos…”.
Pero en cuanto a la dignidad, yo
digo que lo mejor es conservarla: “Tantas aventuras
pudieron pasar hoy, tantas canciones que nos olvidamos de cantar. Tantos sueños
que aparecen de repente... Bueno, dejemos que salgan a la luz".
Hermosa melodía de un deseo, si queremos ser jóvenes para siempre, eso es
posible. Pero no en esta vida. Debemos ir hacia la luz, como hacen todos en el
videoclip de esta canción. Y finalmente, ¿es esto lo que queremos?: "Para siempre joven, quiero ser para siempre
joven... ¿Realmente quieres vivir para siempre, y para siempre, y para
siempre?...". Bonita pregunta... ¿Realmente es eso lo que
queremos?... ¡Feliz Deprimartes!
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